LA PRENSA del Táchira | Agencia.- Las Águilas del Zulia iniciaron la cuarta semana con una victoria contra Bravos de Margarita, por paliza de 12 rayitas por 5, en Guatamare.
Fue el primero de una serie de tres partidos. El equipo rapaz marcó primero, con 3 carreras en el primer acto, tras responder Engelb Vielma con hit, Jesse Castillo con doble y elevado de sacrificio de José Flores.
Otras cuatro de ventaja le dio la ofensiva al abridor Ramón García en el cuarto episodio, gracias a doble con las bases llenas de Olmo Rosario, que barrio las almohadillas, y José Flores con otro biangular remolcó otra que puso el marcador 8-1.
El derecho García extendió su invicto a 4 triunfos, al completar 5 entradas de una carrera, en las que aceptó 4 sencillos, otorgó 2 boletos y ponchó a 6. Los rapaces terminaron de meter el juego en el congelador con 4 anotaciones más en el sexto y 2 en el octavo
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Mientras tanto, en Maracay la ofensiva de Caribes de Anzoátegui pudo dar los batazos en momentos oportunos para llevarse la victoria 3-1 frente a Tigres de Aragua, en el Estadio José Pérez Colmenares.
Pero los focos en este partido se los llevó René Reyes al conectar su inatrapable 1000, para así convertirse en el noveno jugador que logra tan importante hazaña en la Liga Venezolana de Beisbol Profesional.
Los otros miembros del exclusivo club son Luis Sojo (1.007), José Castillo (1.009), Tomás Pérez (1.012), Luis "Camaleón" García (1.058), César Tovar (1.254), Teolindo Acosta (1.289), Robert Pérez (1.369) y Víctor Davalillo (1.505).
Ahora, Reyes buscará superar a Tomás Pérez como el bateador ambidiestro con más imparables en los anales del circuito Reyes lo consiguió en su temporada 22, un récord en el circuito.
Un rodado al cuadro de Niuman Romero en la 3ra entrada permitió a César Valera anotar desde la antesala la primera de Caribes. En el 6to, con uno en base, Denis Phipps la sacó del parque para poner el desafío 3-0.
Tigres amenazó seriamente a Caribes en la baja del noveno. Allí la toletería bengalí atacó al relevo indígena con trío de inatrapables consecutivos, uno de ellos impulsor de la única carrera que fabricaron los de casa, cortesía de Ezequiel Carrera.
Luego de esa acción, y con hombres en primera y segunda, con un out, el relevo de la Tribu se repuso. José Ascanio, en gran forma, retiró a los dos últimos bateadores que enfrentó por la vía de los ponches para así sellar el lauro de los anzoatiguenses.
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