María Cárdenas | La Prensa del Táchira.- En la esquina de la calle 3 con carrera 9, en la Guacara, una casona que atesora entre sus paredes un pedazo de la historia, lucha silenciosamente contra el olvido y la decadencia. Se trata de la Casa Biaggini, una edificación construida a finales del siglo XIX que, a pesar de su valor patrimonial, se encuentra en un estado de deterioro avanzado.
La historia de esta casa comenzó con el hacendado cafetalero Herminio León, quien la mandó a construir. Sin embargo, su nombre quedaría ligado para siempre a quien sería su más ilustre residente, el abogado y político Ángel Biaggini. Este hombre, yerno de León, estuvo a punto de alcanzar la presidencia de Venezuela, pero un giro del destino en forma de golpe de Estado en octubre de 1945, truncó sus aspiraciones políticas.
Tras ser apresado y luego liberado, Biaggini optó por una vida discreta lejos del bullicio del poder. Se instaló en esta casona de la carrera 9, que compartía con su esposa, e instaló allí su oficina de abogado, desde donde ejerció su profesión hasta su muerte, lejos de los reflectores que una vez lo persiguieron.
Hoy la casa que fue testigo de la vida íntima de una figura importante de la política de la primera parte del siglo pasado, muestra las heridas del abandono. A simple vista, una capa de pintura en su fachada intenta inútilmente disimular el deterioro subyacente, estructuras que demandan atención, paredes debilitadas y un aura general de dejadez que contrasta con su inmenso valor histórico. Aunque el inmueble es reconocido como patrimonio y es propiedad del estado, los intentos por rescatarlo han sido infructuosos. En el pasado se propuso convertirlo en la sede de la Academia de Historia del Táchira o de la Orquesta Sinfónica Juvenil, proyectos que generaron expectativa, pero por razones que se desconocen, nunca se materializaron.
La Casa Biaggini se erige, no solo como un símbolo arquitectónico de la ciudad, también como un recordatorio de la fragilidad de la memoria que se diluye con el deterioro y el paso del tiempo.
Descarga nuestra app aquí o escanea el código QR
