Agencias | La Prensa del Táchira.- Diecisiete sudamericanos, de un total de 23 cardenales latinoamericanos, participarán del próximo cónclave que definirá al sucesor de Francisco como el 267° Papa de la historia. Los vientos de la Iglesia católica están, por ahora, lejos de América Latina. De hecho, se habla de una vuelta a la "tradición" de un Papa europeo, de uno asiático (el filipino progresista Luis Antonio Tagle) o el hito de uno africano, el primero desde Víctor I (189-199), pero que sea de tendencia conservadora y no reformista como el argentino de los últimos 12 años.
Por continente, las cifras dan a favor. De los 252 que conforman el Colegio Cardenalicio, son 133 los electores habilitados en el cónclave que votará al nuevo Sumo Pontífice. Deben tener menos de 80 años para aportar su sufragio. En cifras, 50 cardenales son de Europa (40%), 37 de toda América (27%), 23 provienen de Asia (17%), otros 18 son de África (13%) y apenas cuatro representan a Oceanía (3%).
La cifra original era de 136 hasta que se bajaron tres purpurados. El español Antonio Cañizares y el bosnio Vinko Pulji? quedaron fuera por razones de salud, y el italiano Angelo Becciu fue excluido por el Vaticano tras haber sido condenado por una compra fraudulenta de un edificio en Londres.
El peso de Francisco en la composición del cónclave es claro: 108 de los cardenales electores (el 80%) fueron designados por él.
Aun así, predecir quién será el nuevo Papa es una tarea prácticamente imposible. La tradición indica que se trata de un proceso guiado con deliberaciones secretas en las que influyen tanto la espiritualidad como las tensiones geopolíticas de la Iglesia.
Muchos son los analistas que apuntan a hacer historia e imponer un pontífice africano, como Peter Turkson (Ghana) y Robert Sarah (Guinea), especialmente este último por su tradición conservadora. Así se podría reflejar el crecimiento del catolicismo en esas regiones, acompañado por un perfil más ortodoxo, en consonancia con el auge de ciertas corrientes ideológicas en Estados Unidos y Europa en contra del llamado "wokismo".
Otra figura repetida es la del filipino Luis Antonio Tagle, el puente con Asia y el mundo pobre y el favorito para los reformistas, dada su proyección global
Vale recordar que en el cónclave de marzo de 2013 que eligió a Jorge Mario Bergoglio participaron 19 purpurados latinoamericanos, mientras que en el próximo serán 23. De estos, 17 son los representantes de América del Sur.
Fuente Informativa: BioBioChile
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