La forma en que operan algunos cuidacarros ha generado un clima de inseguridad y malestar entre los ciudadanos

Crédito: Francisco Hinojosa

La forma en que operan algunos "cuidacarros" ha generado un clima de inseguridad y malestar entre los ciudadanos

Conductores denuncian que "cuidacarros" se apoderan de las calles

Francisco Hinojosa / ERL | La Prensa del Táchira.- Conductores que transitan y trabajan en diferentes zonas de alta concurrencia en San Cristóbal, denuncian la creciente problemática de algunos "cuidacarros" que, según sus testimonios, se han apoderado de importantes arterias viales, generando caos, cobros indebidos e incluso intimidación.

Cesar Parada, conductor habitual del centro de la ciudad y trabajador en la zona aledaña a la Plaza Sucre, describe como una "odisea" encontrar un lugar para estacionar, especialmente durante las horas de mayor afluencia vehicular. Si bien reconoce la existencia de estacionamientos privados, el costo por hora, que oscila entre los 5.000 y 7.000 pesos, lo ha llevado a optar por estacionar cerca de su lugar de trabajo para poder vigilar su vehículo. 

Sin embargo, su experiencia en estacionamientos no ha sido positiva, relatando el robo de gasolina directamente de su vehículo en dos ocasiones. "El problema es que no hay estacionamientos suficientes y tampoco hay confianza en dejarlos allí por tanto tiempo", lamentó Parada.

Asimismo, denunció que prácticamente se ha convertido en una obligación para los conductores, dar colaboraciones a algunas personas que dicen cuidar autos en la vía pública.

"No es obligación dar colaboraciones pero algunos se dan a la tarea de exigir la colaboración a como dé lugar", sentenció el ciudadano.

Por su parte, Leonard Pinto, taxista con años de experiencia en la ciudad, señala que la proliferación de "cuidacarros" ha exacerbado el problema del congestionamiento vehicular, convirtiéndose en un negocio informal, que en algunos casos, raya en la ilegalidad. 

"Se agarran toda una cuadra y si te vas a estacionar te piden plata y si no le das te insultan", denunció Pinto y especificó que esta situación es particularmente grave en las cercanías de la Gobernación, el Centro Cívico, Plaza Los Mangos y algunos mercados.

Si bien reconoce que algunos "cuidacarros" realizan su trabajo de manera honrada y correcta, critica la actitud de otros que sin ningún tipo de identificación formal, intimidan a los conductores para obtener dinero. "Hay personas mayores que hacen su trabajo, pero también cualquier desechable se pone un chaleco naranja e intimida a los conductores para que le den dinero que muchas veces no se tiene", acusó el transportista.

Caos en horas pico

Aunado a las largas colas y el congestionamiento diario que se presentan con mayor regularidad en zonas concurridas como Barrio Obrero, Centro y la Calle 16, sectores caracterizados por su actividad comercial; Edgar Vera, propietario de una papelería, responsabiliza directamente a las autoridades municipales por la situación. 

A pesar de pagar sus impuestos, incluyendo el derecho de frente de su local, Vera denuncia que los "cuidacarros" abusan y disponen del espacio público frente a su negocio para estacionar vehículos, afectando así la visibilidad de su comercio. 

"A pesar de haber colocado avisos y trancas frente a mi negocio en varias ocasiones, personas que se dedican a cuidar autos, sin ningún permiso estacionan autos frente a mi establecimiento", reclamó con frustración. 

Vera propone como solución la habilitación de estacionamientos públicos por parte de la Alcaldía, tomando como ejemplo la ciudad de Cúcuta y sugiriendo el aprovechamiento de instalaciones abandonadas. Además solicita una mayor presencia policial para abordar la actitud "desafiante" de algunos "cuidacarros" cuando se les reclama.

Es importante destacar que algunos conductores reconocen la necesidad de supervisión en las calles ante la falta de funcionarios de tránsito terrestre que cumplan esta función. Sin embargo, la forma en que operan algunos "cuidacarros" ha generado un clima de inseguridad y malestar entre los ciudadanos. La exigencia de pagos obligatorios y las actitudes intimidatorias han llevado a muchos conductores a sentirse extorsionados al intentar estacionar sus vehículos en la vía pública.

La problemática expuesta por los conductores y comerciantes del centro de San Cristóbal pone de manifiesto la urgencia de una intervención por parte de las autoridades municipales para regular la actividad de los "cuidacarros", garantizar el libre tránsito y el derecho al estacionamiento, así como ofrecer soluciones viables a la escasez de espacios para estacionar.

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