Agencia | LA PRENSA DEL TÁCHIRA.- La candidata oficialista, heredera política del actual mandatario izquierdista, Andrés Manuel López Obrador, ha obtenido una rotunda victoria en las elecciones presidenciales celebradas ayer en el país norteamericano.
México tiene a su primera mujer presidenta. Se trata de Claudia Sheimbaum, una reputada científica de 62 años que ganó ayer las elecciones presidenciales del país con cerca del 60% de los votos, según los resultados preliminares. Su principal rival, la candidata opositora de centro-derecha, Xóchtil Gálvez, habría obtenido algo menos del 30% de las papeletas. La heredera política del actual presidente, Andrés Manuel López Obrador, no sólo ha logrado una victoria incontestable, sino que además ha conseguido ampliar el respaldo electoral que obtuvo se predecesor en los anteriores comicios presidenciales.
"Agradezco también porque, por primera vez en 200 años de la república, me convertiré en la primera mujer presidenta de México. Y, como lo he dicho en otras ocasiones, no llego sola, llegamos todas con nuestras heroínas que nos dieron patria, con nuestras ancestras", expresó Sheinbaum en un mensaje en Ciudad de México, nada más hacerse oficial su victoria
Además de alzarse con la presidencia del país, los resultados preliminares apuntan a que la formación a la que representa la presidenta electa, el izquierdista Movimiento Regeneración Nacional (Morena), en alianza con el Partido del Trabajo (PT) y el Verde Ecologista de México (PVEM) se impondrá con holgura en las Cámara de Diputados y del Senado, con lo que el partido gobernante podría reformar la Constitución sin negociar con la oposición.
Sheinbaum, exjefa de Gobierno de Ciudad de México (2018-2023), basó su campaña en prometer continuidad a los proyectos de López Obrador, mientras que la alianza opositora de Gálvez la acusó de representar el "autoritarismo".
No obstante, la presidenta electa sostiene que concibe "un México plural, diverso y democrático" en el que "el disenso forma parte de la democracia".
Sheinbaum también prometió "garantizar las libertades de expresión, de prensa, de reunión, de concentración y movilización". "Somos demócratas y por convicción nunca haríamos un gobierno autoritario ni represor.
Respetaremos también la diversidad política, social, cultural y religiosa, la diversidad de género y sexual", afirmó.
Además, se comprometió a tener un gobierno "honesto, sin influyentismo, sin corrupción, ni impunidad, será un gobierno con austeridad republicana, disciplina financiera y fiscal, y de autonomía del Banco de México".
Fuente informativa: El Universal
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