María Cárdenas | La Prensa del Táchira-. Durante los últimos años, diversos factores han repercutido en las ferreterías, en donde el poco poder adquisitivo de los ciudadanos, la paralización del sector construcción y la alta competencia dentro de la ciudad, han hecho que las ventas se vean disminuidas considerablemente.
Empresas con años de servicio dentro de la ciudad y algunas que nacieron hace pocos años señalan que el negocio no ha sido el mismo y no han podido recuperarse por completo. Muchos indican que el principal factor de esto es la cantidad de comercios dedicados al sector y de igual manera explican que entre los ciudadanos hay muy poco alcance en lo monetario, por lo cual las ventas se resumen en algunas piezas para reparaciones simples del hogar y uno que otro encargo grande de materiales.
"Las ventas han disminuido mucho, no es ni parecido a cómo era hace años, a veces pasan varios días y es muy poco lo que se vende", indicó Alirio Baldi, dueño de una ferretería en el centro de la ciudad. De igual manera, Meyer Camargo, quien lleva más de 15 años dedicado a este tipo de comercio, señala que "Las ventas son muy bajas, por lo general las personas compran muy poco y solo para restaurar o reparar. El negocio decayó mucho, hay mucha competencia en el sector, hay muchas ferreterías y tenemos que repartirnos los clientes que son muy pocos".
Asimismo, muchos explican que las ventas al por mayor han disminuido casi al punto de desaparecer. "Se vende, son las necesidades del día a día de las personas y tenemos que adaptarnos a sus necesidades, porque las personas ya no cuentan con el poder adquisitivo para hacer grandes gastos", indicó María Bracho.
"Las personas ahora vienen a comprar cosas muy puntuales, más que todo para reparaciones simples de las casas, ya es muy raro que nos hagan pedidos grandes de material que era muy común antes", explicó Edgar Gandía.
Si bien las ventas han bajado considerablemente con respecto a años anteriores, quienes se dedican a este sector explican que, a pesar de la situación, continúan abriendo diariamente con el ímpetu de seguir en el negocio. "Se vende de todo un poquito y bueno, nos queda seguir luchando", indicó Keila Carrero. "Las ventas no son constantes, pero bueno, seguimos trabajando, a veces se vende bastante, pero algunos días no, igual abrimos todos los días", señaló Beatriz Chaparro.
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