Ana Uzcátegui | La Prensa Táchira.- Como un golpe al sector privado, catalogó Aarón Olmos, economista, la decisión del presidente de la República, Nicolás Maduro, de crear una ley para que empresarios realicen un aporte mensual con el propósito de mejorar el ingreso de los pensionados del país. Considera que esto sólo incrementará la excesiva carga fiscal.
Alegan que el hecho de que el Gobierno tenga dos años y medios sin incrementar el salario mínimo integral y sin asumir los pasivos laborales de los empleados públicos, cuando falta menos de tres meses para las elecciones, sólo evidencia el desgaste del modelo económico actual.
"Es un modelo en decadencia. Nadie puede decir que en Venezuela hay bienestar. Indicadores de crecimiento, desarrollo, como educación, salud, vialidad, transporte, servicios están en una situación deplorable", exclamó.
¿Por qué el Gobierno decide no aumentar el salario mínimo y sólo incrementar en 30 dólares el denominado Bono de Guerra?
Pareciera que hay problemas para la generación de los ingresos suficientes como para costear una nómina del Estado. No hace nada el Ejecutivo hacía mención de la no generación de 2.000 millones de dólares producto de las sanciones entre enero y abril. Esto es algo que llama poderosamente la atención porque hasta ahora el presidente lo que ha hecho solamente es incrementar los complementos de las bonificaciones, dejando sin efecto cualquier modificación del salario mínimo que sigue estando en 130 bolívares, recordando que el salario mínimo es la base de cálculo para vacaciones, liquidaciones y todos los elementos de pasivos laborales.
¿Por qué no se ve una expansión del gasto público en meses electorales?
El presupuesto de 2024 es ostensiblemente más elevado que el de 2023. Más de 300% en bolívares y más de 75% en divisas que el del año pasado. En meses electorales se espera ver un mayor desembolso a nivel de bienes públicos, de políticas del Estado, de recuperación a través de las alcaldías, gobernaciones y el Ejecutivo nacional. Lastimosamente, pareciera ser que ese cálculo que se ha hecho para 2024 se está quedando corto en términos de los requerimientos para los trabajadores públicos. No estamos viendo mayor cantidad de bolívares en la calle, tampoco vemos una recuperación de la economía. Pareciera que el 28 de julio está jugando en contra de la posibilidad de Maduro de acceder a algún tipo de mejora en cuanto a su gestión.
Maduro anunció una ley en la que los empleadores aporten ingresos mensuales a los pensionados. ¿Empresarios tendrán una nueva carga tributaria?
Se interpreta otra vez como una dificultad en la generación de ingresos como exportación de crudo y gas. El tema de las sanciones está afectando, pero entre la promesa de incrementar un salario, la pregunta es: ¿si no lo puedo obtener por la vía tradicional, de dónde lo obtengo? Bueno, entonces me volteo al mercado interno y por la vía de la política fiscal de ingreso, bien sea creando una alícuota o una nueva tasa de un impuesto para que sean los empresarios los que financien el faltante de estos incrementos salariales.
¿Cómo lo recibe los empresarios?
No lo reciben con alegría porque, según la encuesta trimestral de Conindustria, una de las cosas que más preocupa a los empresarios es el excesivo aporte fiscal que hacen. Las empresas luchan por mantenerse en una economía que no necesariamente se ha recuperado, y están dando ahora la noticia de que les van a cobrar más impuestos.
¿Es sostenible esa decisión cuando la recaudación fiscal apenas aumentó 10% en el primer trimestre del año?
La recaudación fiscal hasta marzo de 2024 en bolívares es el equivalente a 1.020 millones de dólares. Eso efectivamente para poder financiar, desde la política de intervención cambiaria, pasando por una política de aumento salarial es insuficiente, porque de alguna manera si bien por la vía interna tú puedes estar recaudando a través del Seniat dinero en bolívares, esos bolívares también están sujetos a la economía del país. En cuanto se eleve el tipo de cambio representan cada vez menos.
La Ley Orgánica del Trabajo y todas las medidas que en materia laboral implementó Hugo Chávez en su momento, ¿hoy son totalmente olvidadas por Maduro?
Esa ley sigue estando vigente, hay un Ministerio del Trabajo. El tema es que la realidad país impone un accionar que pareciera todavía reconocer la Ley del Trabajo; sin embargo, los elementos que son puntos de honor para las centrales de trabajadores no se están tomando en consideración. Hace tres días, centrales de trabajadores se reunían y decían que su clamor era que aprobaran un salario mínimo de 200 dólares, y eso no fue tomado en cuenta.
¿Hay un interés real del Gobierno de conectar con los electores?
Los trabajadores públicos siguen siendo muy necesarios dentro de la estrategia del Gobierno porque en definitiva es la nómina más grande. El tema con esto es que desde el punto de vista electoral la promesa de mejora de la calidad de vida pareciera estar un poco lejos todavía. No aumentar el salario puede ser negativo a la hora de medirse en una elección popular. Sin embargo, hay otros mecanismos que el Ejecutivo tiene para mantenerse en contacto con las comunidades, como las cajas y bolsas CLAP.
¿Cuál es el impacto real de las sanciones?
El Observatorio Venezolano de Finanzas (OVF), daba sus indicadores de primer trimestre de la actividad económica y hablaba de crecimiento en un 2%. Quiere decir que el efecto de ese alivio durante seis meses por lo menos se está viendo. Sin embargo, no necesariamente estamos revitalizando la industria o recuperando la actividad económica empresarial venezolana que está llamada a ser la palanca de cambio de la economía. Las sanciones han afectado la economía, los niveles de ingresos, pero ya de alguna manera veníamos con una economía con cierto nivel de debilitamiento, que si bien se recuperó en 2022 mostró mucha pérdida de fuerza en 2023.
La inflación acumulada en el primer trimestre de Venezuela fue 4%. ¿Es una desaceleración saludable?
Toda desaceleración de la inflación es positiva, la pregunta es ¿qué está detrás? En Venezuela los empleadores públicos pagan en bolívares, pero el mercado pide divisas. Y la asignación de precios se hace en moneda extranjera contra un salario en bolívares. Eso crea una distancia donde el tipo de cambio se convierte en una variable fundamental a controlar. Y es allí donde por lo menos si revisamos el año pasado, el Ejecutivo nacional destinó 4.709 millones de dólares para poder controlar un tipo de cambio que de hecho aumentó un 100% al final del ejercicio económico del año pasado. Entonces, efectivamente, sí es indispensable para el Gobierno nacional tratar de controlar este tipo de cambio.
¿Cuál es el valor real del dólar en el país, su punto de equilibrio?
Según estimaciones del OVF, a final de año el tipo de cambio puede llegar a 60 bolívares. Una de las vías tradicionales para calcular el valor de ese tipo de cambio era tomar la liquidez contra las reservas internacionales, y el resultado que nos daba era más o menos ese tipo de cambio que deberíamos tener. Nosotros tenemos efectivamente un tipo de cambio artificial por la intervención del Banco Central de Venezuela (BCV). 4.709 millones de dólares fueron inyectados en las mesas de cambio el año pasado y $1.200 millones en lo que va de 2024.
Hubo crecimiento económico muy moderado en el primer trimestre. ¿Sigue siendo muy focalizado?
La desigualdad sigue estando presente cuando revisamos los resultados del Encovi 2023, que fueron dados en marzo, recordamos que a nivel de la pobreza, entre el que más gana y el que menos gana, en los encuestados había una distancia de 35 veces el salario entre uno y otro. El año 2022 era 70 veces, se disminuye; sin embargo, sigue siendo bastante. La inequidad y desigualdad en el salario sigue estando presente en Venezuela y lo cierto es que a partir de mayo con los anuncios del Ejecutivo podemos tener una economía un tanto diferente en términos de aceleración de algunos indicadores como, por ejemplo, la inflación puede incrementarse, el tipo de cambio pudiese comenzar a crecer, si no hay un efecto directo hacia la actividad industrial.
¿Qué se puede proyectar para la industria petrolera otra vez con sanciones?
Según la OPEP, la variación de los barriles día, tanto por fuente primaria y secundaria han bajado un poco. 1,56% por datos secundarios y 0,34% por datos primarios. Hubo una disminución en la producción en marzo. Lo bueno es que el precio del barril venezolano, la mezcla Merey está en 70 dólares. Sin embargo, el reimponer las sanciones hace que no se puedan ir a los mercados naturales, Estados Unidos y Europa. Razón por la cual Venezuela tiene que ir a mercados asiáticos y vender con descuentos. Estamos hablando que no serán 70 dólares, sino 50 o 45 dólares por barril, se recibirán menos ingresos.
Según Bloomberg, el Gobierno contrató a la empresa Rothschild como asesor financiero para reestructurar la deuda. Venezuela está en default desde 2017, ¿A cuánto asciende la deuda externa?
Estamos hablando de 154.000 millones de dólares. Es un dinero interesante, importante que te hace ver y entender la gran necesidad que tiene Venezuela de poner sus finanzas en orden. Sobre todo, porque de alguna manera caer en una situación default no es nada positivo desde el punto del escenario internacional a nivel de riesgo. De hecho, Venezuela sigue siendo uno de los países con el mayor nivel de riesgo del planeta.
Este es un país que está teniendo dificultad para asumir la carga laboral del sector público. ¿Cómo se puede reestructurar la deuda externa venezolana?
Llama poderosamente la atención que si se me hace difícil poder incrementar el salario y tengo que crear un impuesto para poder financiar el gasto y de alguna manera no le he podido pagar a los tenedores de mis bonos en el exterior. Venezuela tiene necesariamente que enfrentar una situación comprometedora en términos financieros, y tiene que ir a una situación de replantearse los escenarios de pago.
¿Se puede pagar con producción petrolera esa deuda?
Venezuela tendría que recuperar su capacidad productiva, generar ingresos suficientes, oferta agregada interna suficiente y exportar bastante para hacerle frente a estos niveles de endeudamiento.
Descarga nuestra app aquí o escanea el código QR