Ariana Moreno | La Prensa del Táchira.- Un total de 380 vendedores se encuentran a la expectativa en el bazar navideño instalado por la Alcaldía del municipio San Cristóbal, en la calle 7 del centro de la ciudad. Estos trabajadores de la economía informal se enfrentan a bajas ventas y a la falta de información sobre qué sucederá con ellos una vez que termine la temporada navideña.
Según Mayra Orozco, miembro de la Organización del Sindicato Único de Vendedores Ambulantes, Similares y Conexos del Estado Táchira (Suvaceta), la mayoría de los vendedores se encuentran satisfechos con el acuerdo alcanzado con la municipalidad para trabajar de manera ordenada durante esta temporada. Orozco afirma que el 95% de los trabajadores se sienten cómodos en sus puestos, ya que ahora están mejor organizados, mantienen los espacios limpios, se sienten seguros y no tienen que enfrentarse al riesgo constante de ser desalojados. Sin embargo, desde su instalación hace aproximadamente una semana, los vendedores han experimentado una disminución en las ventas.
La vendedora Neida Rubio afirma que el comercio "ha estado flojo" y que esperan que las ventas aumenten para la semana del 24 y 31 de diciembre. Según Rubio, las personas preguntan por precios, pero el bajo poder adquisitivo no les permite tener la misma capacidad de compra que años anteriores.
Pese a que la fecha límite de ventas se estableció hasta el 31 de diciembre, los vendedores aseguran que si después de esa fecha no se ha establecido un lugar para su reubicación, le van a solicitar al alcalde de San Cristóbal, Silfredo Zambrano, un permiso especial para quedarse en el lugar hasta que puedan ser reubicados y se les permita trabajar.
Piden un espacio donde vender
El vendedor Luis Álviarez expresó su preocupación por la situación del bazar en su carácter de "provisional" y solicitó la intervención del gobierno regional para que les facilite un espacio permanente donde puedan vender sus productos. Según Álviarez, han realizado múltiples solicitudes a la alcaldía de San Cristóbal, pero hasta el momento han obtenido respuestas negativas debido a la falta de fondos para realizar una obra que les permita tener un lugar adecuado para trabajar.
Álviarez dice que "el alcalde es inteligente porque estableció el acuerdo durante la temporada navideña, pero que son solo paños fríos", lo cual dio tranquilidad a los vendedores ambulantes. Sin embargo, también expresa temor por el futuro, ya que esta actividad constituye el único medio de subsistencia para las 380 personas que llevan más de 40 años trabajando en el centro de la ciudad.
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