La guerra nunca dejara aspectos positivos, sin importar las causas, y aunque en las guerras no hay vencedores ni vencidos la economía de los países que participen, pero también de quienes no lo hagan se verán impactadas y más en un mundo tan globalizado como el de hoy, pues hasta en la misma Biblia dice que hay tiempo para la paz y tiempo para la guerra y lamentablemente ahora el mundo ingresa en un escenario nuevamente de conflictos con escalada bélica.
Ahora bien, los primeros países en ingresar en este conflicto fueron Rusia y Ucrania lo que trajo consigo, sanciones, nuevos sistemas de pago, subida de los precios del petróleo y de algunos cereales como el trigo, sin embargo, las noticias se han visto sustituidas por el conflicto entre el grupo terrorista Hamás contra Israel, que ahora involucra la franja de gaza, Palestina y Yemen, y que pudiera sumar en los próximos días más países o territorios sobre todo del medio Oriente.
En este sentido, la economía es la gran protagonista pues solo el petróleo puede escalar hasta 130 USD/Barril pero dependerá de quienes integren este conflicto y hasta donde llegue. Por el momento el oro es el gran ganador pues como activo de protección se sitúa en 1.995 USD una cifra record, sin embargo, el futuro dependerá de los aliados, pues cualquier movimiento pondrá en perspectiva una fragilidad logística, un aumento de la demanda o bien un movimiento repentino en los precios de las materias primas.
Finalmente, Venezuela queda nuevamente fuera de lo que pudiera ser una oportunidad de ingresos pues no hay un sistema económico de libre mercado, una industria petrolera fortalecida y de inversiones extranjeras ni una producción cónsona con la demanda mundial pues estamos en apenas 890.000 barriles al día cuando deberíamos estar al menos en unos 5 millones diarios, por ende su ubicación geográfica a pesar de tener las reservas de petróleo más grandes del planeta si dichos recursos no se explotan de nada sirven que estén en el sub suelo, a ello debemos adicionar las sextas reservas de gas natural más grandes o gas para 300 años pero sin la infraestructura logística, empresarial e inversión necesaria para aprovecharla como ingresos al país.
Descarga nuestra app aquí o escanea el código QR