María Beltrán | La Prensa Táchira.- Desde el inicio de la calle 11 entre los pasajes Cumaná y Guasdualito se puede observar la figura que asemeja a un árbol caído que estorba el paso en la vía. Sin embargo, aquí aplica la frase "las apariencias engañan", pues el gran espacio verde que ocupa un canal y medio no es un árbol, sino la maleza que ha crecido a lo largo de estos siete años, la cual tapa los enormes huecos que impiden el buen flujo de los vehículos.
"El tiempo avanza, los años pasan y la maleza, al parecer es la única que se ocupa de cubrir los huecos de la calle", manifiestan de forma irónica los habitantes, pues a pesar de solicitar a los entes gubernamentales la ayuda para tapar cada uno de los huecos, hasta la presente fecha no han obtenido respuesta.
"Cuando estaban en campaña, el actual alcalde dijo que al ganar iba a tapar los huecos de este sector. Nos quedamos esperando a que eso sucediera", manifestó Yanet Castañeda, quien reside en la comunidad desde hace 15 años siendo una de las más afectadas, ya que frente a su casa la maleza mide más de un metro de altura.
El origen de los huecos que inundan a la calle 11 entre los pasajes Cumaná y Guasdualito, según manifestaron los residentes del lugar, señalan se debe a una filtración de agua a causa de unas nacientes ubicadas en el Pasaje Cumaná, sumando además el bote de aguas de algunas casas del sector, descartando de esta manera problemas con la capa asfáltica.
Aunado a esto, una fuerte lluvia registrada hace más de siete años fue "la gota que rebosó el vaso" e hizo que literalmente parte del pavimento "estallara" y se comenzaran a formar los huecos.
Este estallido correspondió al daño de un tubo de agua que baja por la calle, el cual fue reparado con ayuda de los entes de turno, "pero sólo cambiaron el tubo y dejaron los huecos", explica la habitante Neida Blanco.
A causa de la sustitución del tubo, los trabajadores tuvieron que romper aún más el pavimento. Sin embargo, luego de esto no realizaron el bacheo para dejar la calle totalmente operativa.
Más problemas
Aunque los habitantes agradecen el cambio del tubo, los mismos hacen énfasis en que este arreglo sólo solucionó un 40% de los problemas, pues aunado a los huecos el estallido también ocasionó el socavamiento del terreno y "soplo" de la capa asfáltica.
"Desde esa vez la calle se sopló", señala la habitante Castañeda, afirmando además que "si una persona golpea el piso con una pala, el eco y vacío se siente".
Esta situación aterra a los residentes, pues temen que en cualquier momento la calle pueda romperse por completo.
A pesar de que toda la calle se ha visto afectada por este problema, existe una vivienda en particular en la que cada vez que llueve, el porche parece una "laguna".
La casa pertenece a la habitante Heddy Escalante, quien es oriunda del sector.
Escalante reseña que luego de dicho acontecimiento, parte del muro frente a su casa, el cual está unido a la calle se sopló y dejó algunos espacios entre los mismos.
Debido a esto, cada vez que llueve "el agua entra a mi casa tanto por arriba de la calle como por abajo del pavimento", explica la habitante Escalante, añadiendo además que una de las paredes de su casa está siendo afectada por la filtración y humedad.
La frustración y preocupación inundan el rostro de esta mujer, ya que aunque ha solicitado ayuda a la alcaldía en repetidas oportunidades, la respuesta dada ha sido: "no tenemos recursos".
"Es difícil porque he tenido que cargar con este peso durante muchos años, cada día mi casa se deteriora más. Yo vivo sola con mi nieta, sólo espero que algún día puedan ayudarnos y ya el agua no sea un problema que acabe con mi casa", expresó Heddy Escalante.
"En la calle 13 hay más cráteres que en la Luna"
Los habitantes de la calle 13, a la altura de los pasajes Cumaná y Guasdualito están siendo afectados por innumerables huecos en toda la vía.
"Esto está peor que en la Luna", manifiesta Ana Zambrano.
Aparentemente, el problema de los huecos se debe a las nacientes que están ubicadas en varias partes del sector a pesar de estar canalizadas. Existen huecos que tienen hasta ocho años de existencia, y según Zambrano "durante ese tiempo ningún ente gubernamental los ha tapado".
"Cuando hay elecciones vienen, miran y recogen cartas, pero cuando ganan se olvidan de todo", expresó Zambrano. Asimismo, señala que muchas de las casas "de estas calles" tienen filtraciones de agua.
En el caso de la habitante Zambrano, ella manifiesta haberse dirigido tanto a "la alcaldía como al Consejo de Políticas de Infraestructura" y luego de una revisión, concluyeron en que los problemas de filtración debían solucionarlos los mismos dueños de las casas. Sin embargo, no se realizó ningún estudio para comprobar el origen del problema.
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