Venezuela entera grita: Bendito VAR

Víctor Rodríguez | LA PRENSA de Lara.-El VAR (Video Assistant Referee en inglés) se ha convertido en el nuevo ídolo para todos los venezolanos luego de anularle dos goles a Brasil para que el partido quedara igualado a cero tantos por lado ante la vinotinto.

Con este empate, Venezuela suma dos puntos y es tercero del grupo A, de esta manera los dirigidos por Rafael Dudamel están obligados a ganarle a una selección de Bolivia que ha perdido sus dos encuentros, se enfrentarán en la última fecha de la fase de grupos este sábado 22 de junio en el estadio Mineirao de Belo Horizonte, y así seguir en la lucha en la Copa América.

La tónica del encuentro durante los noventa minutos fue la misma. Un conjunto carioca que estaba encima en ataque, mientras que los venezolanos se mantenían encerrados en su campo sin llevar mucho peligro a la meta de Alisson Becker.

Luego de un ataque insistente por los anfitriones, la primera llegada clara y una de las pocas que tuvo Venezuela, fue por medio de Salomón Rondón que logró cabecear cómodo, pero que su remate se fue desviado y se la perdía.

Luego el protagonista del encuentro iba a hacer de las suyas al igual que en el partido contra Perú: el VAR. A los 47, el videoarbitraje diría que no hay penal a favor de Brasil. Posteriormente, a los 60 Gabriel Jesús anotaría el primero, pero el grito de gol fue ahogado en todo el estadio luego que en la revisión diera que un amazónico estaba en posición adelantada. Lo mismo ocurrió, pero con más suspenso para los 30 millones de venezolanos, a tres para el final Philippe Coutinho marcaría, pero nuevamente VAR determinaría posición adelantada. El 0-0 para Venezuela fue como una victoria, mientras que para Brasil fue como una dolorosa derrota, salieron abucheados por su afición.

Cabe resaltar que es la segunda vez en la historia que Venezuela iguala a Brasil en Copa América luego de la del 2011.

Descarga nuestra app aquí o escanea el código QR

Otras Noticias
Futbol

Ureña FC se corona con el título en Táchira

| comentarios