Mototaxistas "sin respiro" por repago del combustible

José Manuel Chacón | La Prensa del Táchira.- Los mototaxistas de la ciudad de San Cristóbal se encuentran sin respiro en medio de la poco cantidad de combustible que les surten en las estaciones de servicio. Para sobrevivir deben recurrir al mercado negro y sin derecho a decir nada, deben comprar la gasolina para no perder días de trabajo. 

En las últimas semanas se ha reducido la atención a esta fracción de trabajadores independientes, aplicando por números de placa por día, lo que conlleva a surtir el preciado líquido una vez por semana, solo 10 litros por motocicleta, obligando la compra revendida en el mercado negro.

Freddy Cuestas, coordinador del sindicado bolivariano de motorizados, detalló que  el elemento principal de mejorar la prestación en el servicio de moto taxi, pasa por un buen suministro de combustible, puesto que la compra fuera de las estaciones encarece el costo de inversión del trabajador, quien debe mantener el precio en las diferentes carreras ofertadas.

"Hemos trabajado durante meses para organizar y planificar con el protectorado el abastecimiento como se hacía antes de la pandemia, sin embargo, los cuidados de prevención del Covid-19 y la cuarentena radical no permiten por el momento retomar esta tarea", indicó Cuestas.

Para Cuestas es primordial dar a entender a la ciudadanía que los moto taxistas son personas que buscan llevar adelante este país con su labor "Estamos para aportar al país, cada motorizado cuenta para sumar en la construcción de Venezuela, en el sindicato luchamos por mejorar las condiciones cada día y legalizar cada vehículo de dos ruedas, y así mejorar la economía de estos trabajadores del volante", precisó.

Dreyler Romero recorre la ciudad capital cada día, con la esperanza en el futuro "Corremos muchos riesgos, pero debemos llevar el pan a casa siempre, nos encomendamos a Dios para regresar sanos y salvos y con la comida, las carreteras no están muy buenas para manejar, igual seguimos trabajando", dijo.

Para Josué Porras, los años de moto taxista le han enseñado a trabajar fuerte por el país "Desde el 2012 soy transportista en moto, me ha ayudado a sostener mi casa, siempre hay que estar al día con los documentos, el tema de la gasolina nos reduce el trabajo, tenemos que comprarla revendida, igual no dejo mi tarea cada día", apuntó.

En el caso de José Molina, lo más importante es salir con la bendición familiar "Siempre salgo encomendado a Dios y con las buenas bendiciones de mi casa, llevo 14 años en este oficio y a pesar de los riesgos no dejo las dos ruedas, fui mensajero y la situación país acabó con los empleos formales", detalló.

Ernesto García, resaltó que no hay nada fácil en esta tarea "Todos los días corremos riesgos, con la lluvia, buscando gasolina, teniendo pericia para saber a quién montar, las carreteras malas, la mejor ventaja es que soy mi propio jefe y mi familia me apoya en todo momento".

En tanto, Manuel Urrea, señaló que lo más complicado es abastecer combustible de forma segura y confiable, puesto que ahora las bombas internacionales lo hacen por una placa diaria "Surtir un día a la semana gasolina nos eleva la inversión, y esto hace que al momento de comprar un repuesto la ganancia sea menor, el dinero que hacemos nos alcanza para la comida diaria en mi casa".

Desde hace años la organización de los motorizados ha previsto legalizar las líneas de moto taxi, aplicando la placa amarilla, y regulando las normativas a través del instituto de tránsito y transporte terrestre, sin embargo, los planes pilotos no han logrado ejecutarse aún en la capital tachirense, a expensas de retomar la normalidad en el país y volver a soñar con una organización enfocada en la capacitación y formación para quienes cada día hacen uso de este tipo de vehículos.

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